Cummins asume el reto de transformar el transporte de carga
Desde 2019, Cummins, a través de su división New Power, ha avanzado en el desarrollo de diversas soluciones tecnológicas para hacer una realidad la transición energética en la industria del transporte de carga
Para 2027 planea arrancar con la producción de un motor 100% a hidrógeno.
Se trata de un motor diagnóstico, es decir, que, del bloque para abajo (pistones, bielas, cigüeñal, etc.), es igual al de un motor convencional, lo que se cambia es la parte superior; con esto el motor será capaz de manejar diferentes tipos de combustibles, diésel, gas natural e hidrógeno, compartió en entrevista Fabio Magrin, director de Cummins New Power Latam.
Magrin compartió que los resultados de las pruebas han sido positivos, “el motor a hidrógeno está dando una potencia y torque similares a su par a diésel, esto es bastante promisorio. El motor está pensado en ser de 15 litros, que es un impulsor que se usa mayoritariamente en tractocamiones”.
Los beneficios que se observan, además de la reducción de emisiones contaminantes, es que para los fabricantes de equipo original (OEM por sus siglas en inglés) es más fácil la transición del motor diésel a hidrógeno, no es necesario cambiar otras partes del motor, como es el caso de los vehículos a baterías, con el motor a hidrógeno el tren motriz continúa igual.
A lo anterior se suma la practicidad de los mantenimientos a los motores a hidrógeno. “Hoy tenemos muchos mecánicos que ya son especialistas en el servicio a motores diésel, esto es una ventaja, porque al ser similar el motor a hidrógeno estos profesionales sólo requerirían capacitación en temas del sistema de inyección a hidrógeno”, definió Magrin.
En consideración del director de Cummins New Power Latam, los motores a hidrógeno son un puente entre las tecnologías a diésel y los vehículos de celda de combustible.
A la fecha Cummins ya se encuentra trabajando con algunos OEM para impulsar la transición de motores diésel a motores a hidrógeno, detalló.
Finalmente, Magrin previó que la adopción de los motores a hidrógeno en México sea efectiva en el mediano plazo, debido a los beneficios en la reducción de la huella de carbono, pero sin tener que cambiar de manera drástica los equipos.